La compañera sentimental de mi mejor compañero es también mi gran amiga. Con ellos tengo una relación muy cercana y puedo hablar sin reservas de cualquier tema, compartimos mucha confianza los tres y sabemos que ninguno nos decepcionará. Los aprecio por encima de todo y es una amistad real y transparente.
Dicho esto, nunca les he ocultado mi interés en eventualmente participar en un trío con ellos, algo a lo que ellos están abiertos pero aún no se deciden a dar el paso por temor a que la experiencia no resulte como en nuestras fantasías...
Aprecio mucho a mi amiga como individuo y siempre me ha gustado de ella esa pizca de sensualidad que posee, no tiene tabúes al hablar de intimidades y siempre me menciona lo sorprendente que sería su desempeño en la cama durante el trío, algo que mi compañero confirma. Siempre le comento que no aborde esos temas si no tiene intenciones de llevarlos a cabo porque luego me quedo solo en casa... cuántas veces he fantaseado con ella después de esas charlas...
Una noche, mi compañero y yo estábamos en un local de juegos apostando al azar y empezamos a conversar sobre el tema:
-Deja de rodeos, deseo tener relaciones con tu pareja- le comenté.
-En algún momento sucederá, no podemos forzar las situaciones.
-¿Hacemos una apuesta? Si sale el 0 en la ruleta, le damos una sorpresa, si sale el número que tú escojas, haré lo que quieras.
Ya habíamos consumido bastante alcohol, mi compañero rió y aceptó.
- Si ganas, te concedo 30 minutos para que hagas lo que desees con ella, si gano, debes entregarme la mitad del dinero que tengas en tu cuenta bancaria.- accedí de inmediato. Él sabía que tenía un buen saldo en mi cuenta, pero valía la pena el riesgo, acordamos que el número que saliera primero sería el ganador, en la quinta ronda salió el 0 y le dije:
-Quiero mis 30 minutos esta misma noche.
-Por supuesto, amigo- expresó entre risas.
Nos dirigimos a su casa y allí estaba mi amiga, esa noche me quedaría a dormir ahí para llevar a cabo nuestro plan. Le expliqué a mi compañero cómo imaginaba la escena. Quería que ella estuviera amarrada a cuatro patas para disfrutar plenamente de la vista.
Me retire a "dormir" y comencé a escuchar los susurros de mi compañero y mi amiga, era la señal que esperaba, ya que habíamos acordado que si los escuchaba, debía dirigirme a su habitación. Abrí la puerta sin hacer ruido y allí estaba: ella atada con las manos detrás de su espalda y con los ojos vendados... mi compañero estaba teniendo relaciones con ella, pero al verme, se apartó a un lado.
La tenue luz rojiza de la habitación creaba un ambiente íntimo, agarré sus glúteos y los separé para admirar detenidamente su parte íntima, recién penetrada y su trasero, disfruté del aroma que desprendía y enseguida empecé a estimularla con la boca. Disfrutaba al saber que acababa de tener relaciones con mi mejor amigo... pasé mi lengua también por su parte trasera, era tal y como lo había imaginado, ¡no! incluso mejor, mi amiga tenía una zona íntima y un trasero hermosos y yo los estaba disfrutando plenamente...
Poco después, introduje mi miembro en su zona íntima húmeda, estaba cálida, sus labios envolvían mi miembro y observaba cómo finalmente lograba penetrarla. Mientras tanto, mi compañero, de pie observando la escena y complaciéndose, se acercó al oído de mi amiga:
-Voy a quitarte la venda.
Ella se giró y sorprendida me vio a mí:
-¡Vaya dos! -exclamó, aunque más sorprendida y excitada que enojada.
Seguí satisfaciéndola, ella recostó su cabeza en la cama y empezó a disfrutar, poco a poco se fue soltando y sus gemidos se intensificaron, tomó la mano de mi compañero, la apretó y le dijo:
-Me está haciendo sentir muy bien, amor, ¡me correré con él, amor, amor! ¡amor! ¡Amor!¡Amooor!!!
Comencé a percibir cómo su zona íntima se contraía y mi miembro se humedecía aún más, ella miraba a mi compañero y a mí mientras experimentaba un orgasmo con mi miembro dentro de ella.
Mi compañero, que todavía se encontraba a su lado masturbándose, aprovechó para eyacular en su boca y yo seguí penetrándola hasta que ya no pude resistir más y acabé dentro de ella... saqué mi miembro y vi cómo todo el líquido salía... una escena hermosa. Ella solo expresó:
-Gracias, chicos.
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