Saludos seguidores, luego de unos d铆as laboriosos tengo la oportunidad de compartir la continuaci贸n de esta historia.
Tras haber conversado sobre diversas fantas铆as con mi vecina, nos encontramos por casualidad en una fiesta de una amiga en com煤n (sin saber previamente que asistir铆amos).
Al verla, me qued茅 sin palabras; no sab铆a c贸mo comenzar la charla. Solo recordaba las im谩genes que me hab铆a enviado semanas atr谩s y lamentaba mi falta de inventiva.
Durante la fiesta, compartimos el tiempo con nuestros grupos de amigos, disfrutamos de algunas bebidas y cigarrillos. En un momento, coincidimos en la pista de baile al ritmo de una canci贸n; aunque sent铆a el deseo de acercarme a ella, decid铆 esperar para aumentar su curiosidad y deseo antes de hacerlo.
Las horas pasaron y seguimos disfrutando de la fiesta hasta altas horas de la noche; al bailar, la cercan铆a hizo que ella notara mi excitaci贸n, pues era inevitable no experimentar una erecci贸n en esa situaci贸n tan 铆ntima.
En cierto momento, impulsado por la pasi贸n, decid铆 salir de la discoteca a fumar un cigarrillo. A los pocos minutos, ella me sigui贸 y dijo: "Quer铆a bailar esta canci贸n contigo". Le confes茅 que me sent铆a muy acalorado, raz贸n por la cual hab铆a salido un momento al exterior.
Nuestra miradas reflejaban cierto morbo en ese instante, ya que ambos dese谩bamos abordar el tema de nuestras anteriores conversaciones; sin embargo, ninguno de los dos tomaba la iniciativa (hasta entonces). En tono jocoso, le mencion茅: "No hab铆a sentido tanto calor desde aquella noche de nuestra charla". Ella sonri贸 y ri贸 de forma picara.
Se acerc贸 un poco m谩s y nos besamos, aquel beso parec铆a condensar la excitaci贸n acumulada por nuestras fantas铆as y la noche de baile; era inevitable no experimentar una erecci贸n en ese momento. Tras un largo beso, nuestras miradas se encontraron y la idea que compartimos fue clara: "Es hora de cumplir con lo que dese谩bamos en aquella noche de conversaci贸n".
Llegamos a un hotel, ambos mostr谩bamos un deseo ardiente; nos besamos y empec茅 a recorrer su cuerpo, notando lo mojada que estaba en aquel instante; entonces, me dediqu茅 a besar y lamer su intimidad para disfrutar de sus jugos. Disfrut茅 de uno de los mejores momentos de sexo oral de mi vida, evidenciando su excitaci贸n y anhelo de ese momento; lo 煤nico en lo que pensaba era en llevarla a la cama y hacer realidad todo lo que le hab铆a descrito anteriormente.
Experimentamos momentos salvajes en los primeros minutos, la fluidez con la que nos un铆amos y el placer mutuo eran casi perfectos. Tras varios encuentros 铆ntimos, me percat茅 de que era hora de regresar al trabajo.
Antes de partir, tuvimos un 煤ltimo encuentro 铆ntimo; sin embargo, le hice una petici贸n especial. Deseaba experimentar con ella aquello que tanto me hab铆a intrigado en esa noche, para mi sorpresa, su 煤nica condici贸n fue hacerlo sin protecci贸n; entregados a la pasi贸n, nos dedicamos a disfrutar el momento. Le propuse que se ausentara de su trabajo para poder seguir disfrutando juntos en el hotel, a lo que accedi贸 con entusiasmo.
Antes de despedirnos, anhelaba cumplir mi 煤ltimo deseo: ba帽ar su rostro con mi semen y verla cubierta de mi excitaci贸n, pero la falta de energ铆a y reservas me imped铆an seguir, lo mismo ocurr铆a con ella; decidimos abandonar el hotel y, entre besos, cada uno retorn贸 a su hogar.
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